Si bien los
sitios de vuelo son muy amplios, las pistas enormes y las condiciones de vuelo
muy buenas, no dejamos de estar en la mitad de un potrero sin energía, sombra o
facilidades de algún tipo. Por eso entré ayer a Coto, que es como un Almacén Éxito
y compré un buen mecato, frutas, una nevera de icopor (aquí le dicen Telgopor: Icopor
es una marca sólo de Colombia y traté de explicarle a una muchacha del
supermercado que me mostrara dónde estaban las neveras de poliestireno
expandido y casi se bloquea ahí mismito), una colchoneta y una silla para cuidar
la espalda. Esta mañana salimos del hotel a las 8:30 AM y paramos a comprar
hielo, gaseosas y cosas para tomar y comer en la pista.
Al llegar
entramos donde el equipo argentino a recoger un cargador de radio para Sergio.
No crean que a mí es al único que se le quedaron cosas en Colombia. Cargamos el
transmisor un rato y fuimos a una de las 5 líneas de vuelo de Madariaga (¿entre
otras, por qué Madariaga no tiene doble r?) donde ya estaba Lassi Nurila de
Finlandia. Estaba ahí con sus dos modelos Sensation, muy bien acabados, muy
bien pintados y perfectamente montados. Todos los cablecitos bien aplicados y
en fin: unos aviones muy bien montados.
Empezamos a
volar con viento más o menos en calma como a las 10:30 AM. Hicimos tres vuelos
cada uno sin problema, todos P.
En la línea
de vuelo que estábamos, la caja no coincidía con el eje de la pista, entonces
tocaba despegar y alinearse diferente. Un ejercicio chévere, porque lo obliga a
uno a salirse del paradigma o el prejuicio de usar la pista como referencia
para la profundidad del vuelo. Es muy difícil mantener el plano de vuelo
constante cuando no se usa nada en tierra como referencia. El poco viento que
tuvimos hasta las 4 PM lo tuvimos totalmente enfrentado, con una mínima
componente sacadora pero muy laminar y relativamente fácil de manejar.
Luego llegó
a esta línea el equipo canadiense: Michi Akimoto y Xavier Mouraux. Empezamos a
alternar vuelos y más tarde llegó a nuestra línea, Cristoph Paysant Le Roux con
Benoit, su hermano y Loic Bourbaud. Ambos de Francia. También llegó Jean Paul
Deltiel y estuvo con ellos. Como siempre, ver volar a CPLR es atortolante. Es
una dosis de anestesia. Apenas estaba haciendo los primeros ajustes en el
avión, pero en general, independientemente del resultado del concurso, y sin el
ánimo de “endiosarlo”, es un piloto fuera de serie. Siempre amable, aterrizado,
conversador, sin secretos, misterios ni las pendejadas que ya hemos visto por
ahí. CPLR es un gran tipo más allá de lo deportivo. Y algo muy chévere de esta
modalidad, es que en general, salvo unas muy contadas excepciones, todos son
gente tranquila, sin misterios, sin secretos. Saben que el secreto de esto está
en la cabeza y en los dedos y no en ocultar algo de su software o de su
hardware.
Cosas
Interesantes del día:
1.
Utilizamos
la app F3A Zone de Andrew Palmer, el Neozelandes. Muy chévere y muy precisa. La
usamos hoy para medir las distancias de vuelo y las profundidades. También para
corroborar la caja que estábamos usando.
2.
Los
problemas de vuelo son, en mi caso, oportunidades de mejora del piloto. Mi
hardware está al 100%. Cuando tengo la oportunidad de hacer un vuelo sin
viento, en condiciones “Hello Kitty”, me digo: no tengo a quien echarle la
culpa, el avión está volando perfecto.
3.
Hemos
tenido una excelente impresión de la organización hasta ahora. Los campos de
vuelo marcados, la logística organizada, respuestas de todas las preguntas,
ecuanimidad en el trato, etc.
4.
Ningún
equipo ha tenido privilegios de pistas exclusivas ni sitios especiales. Estamos
en el socialismo del siglo XXI: todos entrenando en las mismas condiciones sin
distinción, hoy compartimos pista con el 8 veces campeón del mundo como con
cualquier otro competidor. No hemos visto al equipo de Japón, pero no sé si
están en otro sitio de entrenamiento o si no han llegado.
Por la
tarde se incrementó un poco el viento, cambió la dirección de vuelo y pudimos
volar con viento 100% cruzado y entrador: en mi opinión la condición más dura,
por lo que entrenamos tres vuelos más en el sentido contrario al que habíamos
volado por la mañana. Aquí hay que estar preparados para volar en cualquiera de
las dos direcciones porque en el sitio del evento ventea para donde se le
antoje a mi Dios, así que en una manga puede fácilmente haber tres o cuatro
cambios de dirección de vuelo. Esto va a exigir mucho a los jueces para que estén
más “mosca”. Sergio y yo hicimos esta tarea juiciosos en Medellin volando detrás de la pista, para practicar ambos lados. En Alcaravanes siempre ventea igual.
De vuelta
en Gesell nos encontramos en el restaurante con el equipo estadounidense y
comimos en una parrilla.
El equipo
estadounidense nos ha invitado a volar con ellos mañana en la mañana, por lo
que vamos a compartir la línea, y muy posiblemente probaremos Pinamar en la
tarde. Creemos que Madariaga se va a llenar mucho.
Todo
cargado desde la pista así que subo esto y a mirar para adentro. Hay que
descansar.
Algunas fotos de hoy
El Zonda (diseno de Mariano Gostanian) de Andres Pantarotto de Argentina:
El Zonda de Mariano Gostanian
El Ascent de Marcelo Velez, quien escribe, con Lassi Nurila volando al fondo
Hermoso dia para volar
Sergio Velasquez y su BJ Craft Element
El Xareltoo de Loic Burbaud
Finos detalles en la pintura: observen las figuritas aresti
Sin comentarios... el palmares de Cristoph. El "capo di tutti capi"
frenos en el T canalizer de CPLR
Galactika de CPLR
Aviones del equipo Colombiano
"fly perfect"
Michi Akimoto muy juicioso tomando notas del vuelo de Xavier
Equipo Colombiano: Sergio Velasquez y Marcelo Velez
Comida con el equipo de USA.
Great job!
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